Axel Kicillof esta jugadísimo con los tiempos y, como se ve el panorama, si no accede al pedido de los intendentes de Juntos por el Cambio no va a conseguir destrabar en la Legislatura el endeudamiento por 150 millones de dólares para -supuestamente- pagar sueldos, aguinaldos y ayudar a municipios con problemas de caja.
Si bien la coalición contraria es la que tiene la llave que habilitaría los votos necesarios para autorizar un endeudamiento a ciegas -es la primera vez que un gobernador pide deuda sin haber presentado el presupuesto ni la Ley fiscal- los intendentes de Juntos por el Cambio pusieron condiciones para que sus legisladores levantan la mano en el recinto, algo que le hicieron saber en la cita al ministro de Finanzas y Hacienda bonaerense, Pablo Lopéz.