EL MOTÍN DE MORENO

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El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y su ministro de Seguridad, Sergio Berni, fueron algunas de las personalidades de la política que no quisieron estar afuera de la fiesta de la Selección argentina campeona del mundo en el Monumental de Núñez. Ambos, estuvieron en uno de los palcos del estadio de River Plate viviendo la victoria de la celeste y blanca por 2 a 0 contra Panamá.

 

Kicillof y Berni no se privaron de gritar los dos goles, el de Thiago Almada y, obviamente el de tiro libre de Lionel Messi, el cual significó el número 800 en la carrera profesional del capitán del seleccionado nacional.

Mientras el gobernador y el ministro de Seguridad de Buenos Aires disfrutaban del espectáculo, en el terreno de Moreno se vivían momentos de tensión en una comisaría, donde unos 30 reos tenían de rehén a un policía y mantenían en vilo a todos, menos a Axel Kicillof y Sergio Berni, producto del motín.

El motín duró 4 horas y fue en pedido de mejores condiciones de alojamiento en la Comisaría 4ª de Cuatel V.