El Consejo General de Educación cerró el proceso de consulta de lo que denominan un "acuerdo histórico": el cambio del secundario. Un secundario más flexible, conectado a la realidad y vinculado al mundo laboral.
Los cambios propuestos están puestos en cuatro aspectos: el fin del currículo enciclopédico; modificaciones en la evaluación; acompañamiento integral y formación docente; y consenso multisectorial.
Tras el debate del documento entre las diversas partes del Consejo General de Educación, hubo consenso. Ahora, la intención es que el proyecto llegue en diciembre a las escuelas, alumnos y padres para que también den su veredicto. Luego, se presentará en la Legislatura de Mendoza. El objetivo es que los primeros cambios puedan estar a partir de 2026
De acuerdo a lo plasmado por el Consejo General de Educación, "es urgente abandonar el modelo tradicional, calificado de obsoleto y fragmentado"
Según lo planteado, el éxito de la reforma depende de transformar la evaluación, que actualmente se percibe como "punitiva" y enfocada en la calificación numérica.
El docente ocupa un rol clave en la transformación propuesta. Desde Educación plantean que para hacer posibles los cambios pedagógicos, se requieren mejores condiciones de trabajo y un nuevo rol profesional