La especie elegida para la liberación fueron gavilanes recuperados, ya que disuaden y controlan catas y roedores, lo que colabora con la mitigación de los daños que producen.
El Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria de Mendoza (Iscamen), en conjunto con la Fundación Cullunche, la Dirección de Biodiversidad y Ecoparque y la Municipalidad de San Martín, liberaron gavilanes mixtos para el control de catas en fincas productivas de San Martín.
La suelta de aves rapaces es uno de los métodos alternativos e incruentos que pueden utilizarse para el control de las catas, que comprometen seriamente la producción. Esta alternativa se enmarca en el manejo integrado de control que combina diferentes herramientas disponibles.
Mario Montepeloso, productor de almendras del departamento, detalló la importancia de estas acciones al señalar: “Junto a la Municipalidad, la Fundación, el Iscamen y los productores, estamos trabajando entre todos para ayudarnos y avanzar en su control. Es una alternativa más para ahuyentarlas”.
Jennifer Ibarra, de la Fundación Cullunche, comentó: “Esta experiencia es muy interesante. Tenemos una previa en otra finca donde liberamos rapaces y se han instalado. Se trata de gavilanes recuperados del daño que lea causan con disparos, golpes, etcétera sin tener en cuenta que son sumamente útiles porque controlan roedores y otras plagas, además de estar protegidas por la ley de fauna”.
Por su parte, Julio Acevedo, director de Desarrollo Económico de la Comuna, explicó: “Las catas generan daño y es una preocupación que nos obliga a encontrar soluciones. La problemática es grande y especialmente en la época de brotación, ya que causan daño para la próxima temporada. Es un problema que requiere abordarlo integralmente porque tiene múltiples dimensiones”.
La finca elegida en San Martín para la liberación produce almendras, cultivo muy amenazado por las catas debido a sus hábitos alimenticios. Según especialistas, las cotorras consumían preferentemente los frutos maduros pero actualmente se observa daño en momentos de floración.
A diferencia de otras especies de loros, las cotorras construyen sus nidos en diversos tipos de árboles y estructuras artificiales como torres o galpones y suelen desplazarse entre 3 y 5 km desde el nido hasta los sitios de alimentación en primavera-verano y hasta 24 km en otoño-invierno.
Cabe recordar que el control biológico es un tipo de manejo que considera a un agente biológico como mecanismo de control de las especies que se presentan como plagas potenciales, como por ejemplo las palomas y algunos roedores de la periferia urbana.
La provincia cuenta con más de diez especies de aves rapaces que habitan diferentes ecorregiones, entre las que se encuentran gavilanes mixtos, águilas, halcones y lechuzas, todas ellas protegidas por la Ley de Fauna Silvestre.