En la última etapa antes de las elecciones legislativas, el Tesoro de Estados Unidos volvió a metetse en el mercado cambiario con una gran compra de pesos a través de diversos bancos, con el objetivo de contener la suba del dólar.
El secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent, habría puesto otros US$ 400 millones sobre la mesa para comprar pesos, luego de una semana compleja para el marcado cambiario.
A pesar de varias intervenciones de Bessent luego de la aceptación del swap, la cotización del dólar subió $72 en las últimas dos semanas, impulsada por la elevada demanda de ahorristas que buscaron cubrirse en la previa electoral